El Trastorno Obsesivo Compulsivo, también conocido como TOC, responde a un problema psicológico que puede aumentar sus síntomas en el futuro. A día de hoy, esta patología afecta entorno a un 2% de la población e implica la presencia de compulsiones y obsesiones, que generan un malestar interno con la persona que lo posee.

El inicio del trastorno puede ser gradual o agudo. Algunos sucesos vitales estresantes representan un factor importante en el inicio del TOC. Otros de los síntomas pueden comenzar con un contexto de aumento de la responsabilidad personal.

Las áreas que suelen afectar son en la vida personal, familiar, social, académica, laboral y de ocio. No obstante, es posible detectar a tiempo, así como diagnosticar y plantear un posible tratamiento.

A continuación, te mostramos cuales son los síntomas más frecuentes que muestran las personas que padecen de este trastorno, así como las causas que lo provocan y el tratamiento.

Qué es el trastorno obsesivo compulsivo

El trastorno obsesivo compulsivo (TOC) es una patología de salud mental, que puede provocar una serie de pensamientos y miedos (obsesiones), que ocasionan comportamientos repetitivos (compulsiones). Tanto las obsesiones como las compulsiones, afectan e interfieren en las actividades diarias, causando un gran sufrimiento emocional, pues la persona que lo sufre no los puede controlar ni evitar.

El TOC, en ocasiones, puede determinarse en temas o comportamientos concretos, por ejemplo, un miedo constante y excesivo a contaminarse por los gérmenes al tocar cualquier superficie. Para aliviar esta sensación de estar “sucio”, se puede llegar a lavar las manos compulsivamente y tomar otras medidas higiénicas, hasta el punto de irritarse y agrietarse las manos.

Los pensamientos obsesivos pueden caracterizarse por ser agresivos y causar cualquier tipo de daño a las personas de nuestro círculo cercano. Además, pueden estar enfocados a los temores o fobias, o a ideas que se manifiestan por una obsesión como el orden o el tiempo. Por otra parte, se puede llegar a reiterar en dudas repetitivas para evitar ciertos problemas.

Además, se siente la necesidad de llevar a cabo actos compulsivos para tratar de aliviar el estrés. No obstante, estos pensamientos vuelven una y otra vez. En Viate, contamos con una amplia experiencia en trastornos obsesivos compulsivos, y con los mejores expertos para poder ayudarte.

Cuáles son los síntomas del TOC

Los síntomas del trastorno obsesivo compulsivo pueden darse, tanto en las obsesiones como en las compulsiones, aunque tal vez solo se muestre en una de ellas. Estos pensamientos pueden ser poco racionales y afectar en el día a día de la persona que lo padece. Identificar a tiempo los pensamientos y comportamientos obsesivos, puede ayudar reconocer los síntomas que provocan el TOC.

Control absoluto

Todo tiene que estar bajo su control. La necesidad de tener esta posesión, garantiza una mayor seguridad y, por tanto, poder desenvolverse en situaciones complejas.

Perfeccionismo

Una de las pautas, que sufren las personas que padecen de TOC, es ser perfeccionista y exigirse demasiado consigo mismo. Por tanto, no permiten errores propios o de otras personas, y necesitan la comprobación constante en su vida laboral y personal.

Amenaza constante

Una persona con TOC se sienten amenazadas en todo momento, ya sea por una catástrofe o porque algo malo les vaya a suceder.

Exceso de responsabilidad

Tener un sentimiento excesivo de responsabilidad es uno de los síntomas de esta patología. Asimismo, poseer la necesidad de seguir unos patrones de conducta para hacer siempre lo correcto.

Controlar pensamientos

Las personas que padecen TOC, necesitan controlar los pensamientos propios y ajenos, ya que les dan excesiva importancia, sobre todo de su significado.

Ideas rígidas

Para ganar seguridad, suelen tener unas ideas rígidas e inamovibles. No atienden a cualquier argumentación que pueda cambiar sus pensamientos.

Causas del trastorno obsesivo compulsivo

A día de hoy, todavía no se conocen las principales causas del trastorno obsesivo compulsivo. No obstante, se pueden identificar ciertos patrones que ayudan a reconocer a las personas que presentan este tipo de alteraciones mentales. Asimismo, existen otros factores como la genética, biología y química que pueden desempeñar un papel en la afección.

Desde el punto de vista biológico, se ha constatado que las personas que la sufren presentan alteraciones del lóbulo frontal del cerebro y en la secreción de serotonina. Además, hay ciertos patrones que señalan la aparición en la adolescencia o siendo un adulto.

Por otra parte, se manejan otro tipo de hipótesis como la sobreprotección y la educación rígida, así como tener una necesidad de control y perfeccionismo. De la misma manera, este trastorno puede aparecer tras una experiencia traumática.

Prevención y tratamiento del TOC

Prevenir el trastorno obsesivo compulsivo, hoy por hoy, no es posible. Por ello, la mejor solución para controlarlo es seguir un tratamiento adecuado con profesionales.

Llevar a cabo terapias con un psicólogo, ayuda a los pacientes con esta patología a controlar sus conductas. Uno de los métodos de terapia es presentar una serie de escenarios, en los que la persona afectada pueda enfrentarse a sus obsesiones y, de esta manera, poder ajustar su reacción para evitar problemas como la ansiedad.

Como puedes observar, existen mecanismos eficaces para poder controlar este trastorno y poder conseguir una mejor calidad de vida.

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