Hace algo más de un año, parece que todo se torció, con la llegada de la pandemia. Es normal, puesto que la mayoría de nosotros no hemos vivido una situación límite de este calado. La inseguridad, el estrés ante la incertidumbre sobre la salud de nuestros familiares o de nuestra situación económica pueden haber tocado techo durante este tiempo.
Más aún, muchas personas han podido desarrollar diferentes problemas de salud mental, debidos, sobre todo, al shock del confinamiento inicial y por las diferentes medidas de contención de la propagación del coronavirus.
Es más, en un primer momento ya pudimos dar una serie de recomendaciones ante el aislamiento. De la misma forma, Elisa Múgica; una de las directoras de nuestro centro, ha coordinado diferentes tareas de apoyo psicológico a profesionales en primera línea frente a la COVID, uno de los grupos de población más afectados mentalmente ante esta situación.
Las profesionales de Centro Vitae han realizado campañas de prevención de problemas emocionales asociados a la pandemia con EMDR. Intervención en familias y niños y prevención en sanitarios.
Han desarrollado un programa para sanitarios, junto al Colegio profesional de enfermería de Aragón y el colegio profesional de psicología de Aragón en dos fases, con muy buenos resultados.
Ahora ya comenzamos a ver la luz al final del túnel. Aun así, queda mucho por trabajar y quedan muchas heridas por subsanar. No se ha superado la pandemia todavía, y queda mucho tiempo para que ello suceda.
Por ello, gozar de una buena estabilidad mental es más que recomendable. En este sentido, si estás buscando esta estabilidad, no cabe la menor duda de que hay que mantener una buena actitud, ya sea para poder tener una perspectiva de todo por lo que se ha pasado, como para poder adaptarnos a lo que queda y, lo que es más importante, ver con otros ojos el futuro.
¿Cómo ser Positivo ante la pandemia de COVID?
Durante más de un año, hemos tenido que aprender a marchas forzadas. La cuestión es: ¿cómo seguir manteniendo una actitud positiva? Aquí, os doy una serie de aspectos que se pueden trabajar para ser más positivo, de las cuales la mayoría se vinculan con la resiliencia.
La resiliencia es un aspecto de la psicología que muchas personas han comprendido durante esta pandemia. No es otra cosa que saber adaptarse a las adversidades que se nos plantean y saber afrontarlas con la mayor entereza y optimismo.
Obviamente, hay personas que, debido a su innata actitud o por su propio contexto vital, son más resilientes que otras. Lo que es seguro es que, hoy en día, todos somos más resilientes que hace algo más de un año.
Capacidades y Limitaciones
Tener un instinto de control constante de la situación está totalmente contraindicado en una pandemia, por razones lógicas. Nadie es capaz de controlar una situación de tal magnitud, como se ha comprobado. Por eso, si se quiere ser más optimista, habrá que sentar unas bases. Una de ellas es que no podemos controlar todo y que tenemos una serie de limitaciones, lo que en definitiva significa quitarse una gran presión y pensar con mayor nitidez.
Reconocimiento y Agradecimiento
En mayor o en menor nivel, todos hemos tenido que cambiar abruptamente nuestra forma de vivir o de trabajar. Hemos tenido que hacer increíbles esfuerzos emocionales para poder seguir adelante, ante un desafío único. Para poder tener una actitud optimista, es más que necesario que reconozcas tus logros durante la pandemia, al igual que deberías de sentirte orgullosos por tus logros vitales, ¡grábatelo a fuego!
Aprendizaje
Una de las claves para mantener la mente saludable y poder sentirse motivado es el aprendizaje. Siempre hay algo nuevo que aprender y ahora, debido a que no podemos viajar tanto como nos gustaría, tenemos una ocasión excepcional para hacerlo. Da igual que sea aprender algo concreto para tu mejora profesional, como para cualquier actividad o hobby. LA cuestión es mantener la mente activa y despejarte.
Ejercicio
Una recomendación que hacemos siempre y que es vital para mantener una buena actitud. El ejercicio es una de las mejores herramientas para afrontar problemas como la ansiedad o la depresión. Se encarga de activar las hormonas vinculadas con la autoestima, la confianza o con el placer, sin ir más lejos.
Pensar en Objetivos a Largo Plazo
Una de las cosas que hemos aprendido es a estar con nosotros mismos. Socializar sigue siendo igual o más importante y las nuevas tecnologías nos han ido ayudando. Ahora bien, también hemos tenido más tiempo para nosotros mismos. En este sentido cabe recalcar que nos hemos podido conocer mejor y, en consecuencia, saber más sobre lo que estamos haciendo con nuestra vida y qué es lo que necesitamos para ser más felices.
Compañías Tóxicas
Nuestro entorno puede jugar un papel importantísimo. Su actitud puede ser muy contagiosa, para bien o para mal. Rodéate de personas optimistas y que estén pensando en diferentes aspectos positivos. De la misma forma, seguro que en tu entorno tienes a personas que están continuamente hablando de todo lo malo que tiene que ver con la pandemia. Evita al máximo este tipo de compañías, está más que claro que hemos estado recibiendo demasiado información al respecto.
Lenguaje Positivo
Hablando en plata. Al igual que no queremos que el típico “cenizo” nos dé mensajes negativos sobre la pandemia o cualquier asunto relacionado, nosotros mismos no tenemos que serlo. Hay que pensar en positivo y mostrarlo mediante las palabras, ya que non el reflejo de lo que pensamos, o mejor aún, nos pueden llegar a convencer a nosotros mismos. Pensar en que ya queda menos, que de aquí todo va a salir mejor, tiene que ser expresado, tanto para tus adentros, como con tus allegados.
Como puedes ver, estos consejos te pueden ayudar para esta situación concreta, pero también para el futuro. Si lo consigues ahora, seguro que podrás afrontar todos tus objetivos con una actitud mucho más positiva.